La sostenibilidad ha sido un tema candente en la industria de la logística durante bastante tiempo. El aumento precipitado de los precios de las materias primas, impuestos al CO₂, las crecientes demandas de los clientes en las cadenas de suministro y las expectativas de los jóvenes profesionales son algunas de las tendencias más relevantes actualmente. Varias empresas de transporte y logística definieron objetivos de sostenibilidad hace mucho tiempo en respuesta a la creciente presión de todos lados.

Hablamos sobre los últimos desarrollos y desafíos de la sostenibilidad en la logística y mostramos posibles caminos hacia un transporte más ecológico.

La industria logística como contribuyente y víctima de la crisis climática

La logística es uno de los mayores contribuyentes a las emisiones de gases de efecto invernadero. En México, el porcentaje de emisiones contaminantes a partir del uso de energéticos es superior al promedio de los países del G-20.  Por lo tanto, un nuevo enfoque hacia la sostenibilidad es esencial en este sector.

Además, el sector del transporte se ve especialmente afectado por las consecuencias del cambio climático. De acuerdo con un artículo publicado por Avelina Ruiz, Juan Hernández y Emilio García en WRI México, el transporte es responsable de la emisión de 148 millones de toneladas de CO₂ y es la segunda fuente de emisiones de GEI. De acuerdo con las Contribuciones de México al Acuerdo de París, si el país llegaría a 250 MtCO₂ si no hay políticas contundentes de mitigación. 

La discusión sobre la sustentabilidad en la logística ya no es un ejercicio teórico y abstracto. Sin embargo, no son solo los fenómenos meteorológicos extremos los que demuestran la necesidad de protección ambiental en la logística.

Clientes y empleados exigen estrategias de sostenibilidad fiables

Las corporaciones globales como BMW Group están liderando el camino y poniendo el ejemplo. En el futuro, las emisiones de CO₂ de los proveedores que una empresa contrate determinarán la adjudicación de contratos. Esta estrategia da como resultado incentivos económicos para todos los participantes en la cadena de suministro, así, obligándolos a vigilar de cerca su balance de CO₂ y a reducir las emisiones donde sea posible.

La importancia hacia la sustentabilidad viene de los clientes y también de los empleados. Los jóvenes talentos en particular son conscientes del medio ambiente en el reclutamiento, conocidos por prestar atención a si los empleadores muestran un compromiso confiable con la sostenibilidad. Según un estudio sobre el compromiso de los empleados mencionado en un artículo de Business Leadership Today, el 51 % de los empleados indicaron que “no trabajarían para una empresa que no tenga políticas sólidas que aborden los problemas de sostenibilidad social o ambiental”.

Sorprendentemente, los millennials (también conocidos como “Generación Y”), represente de alrededor del 75 % de la fuerza laboral para 2025, buscan empleo en empresas socialmente responsables

Pasos para reducir las emisiones de CO₂ en la logística

Aun así, la realización es a veces difícil. En parte porque cambiar la mentalidad hacia la protección del clima siempre implica algún tipo de inversión. Donde pueden surgir preguntas como: ¿Qué tan asequible es la logística sostenible? ¿Y quién correrá con los gastos?

Para aumentar la sostenibilidad en el sector del transporte, es necesario realizar varios ajustes.

Riege_Software_CO2_Fussabdruck_in_der-Logistik_Truck

Esfuerzos regulatorios sobre protección del clima: límites de CO₂ en logística

Cuando se trata de reducir las emisiones en la logística, lo primero que suele venir a la mente son los motores que se utilizan en los vehículos de transporte. Pero los motores de bajas emisiones son solo una parte de la ecuación, un camión con un motor muy eficiente que maneja largos desvíos con tráfico intermitente hace poca diferencia. Otros factores, como el almacenamiento, el embalaje y los recorridos vacíos, también juegan un papel importante en la huella de CO₂.

No obstante, la introducción de umbrales es un paso importante, garantiza que los fabricantes sean empujados hacia innovaciones más sostenibles. Por lo tanto, los límites de CO₂ han estado vigentes para vehículos comerciales pesados ​​y algunos tipos de aviones desde hace varios años, en la industria del transporte marítimo, estos umbrales se aplican al contenido de azufre del combustible usado.

Límite de CO₂ para vehículos comerciales pesados

La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SCT) de México espera que el kilometraje de la flota de camiones en las carreteras mexicanas aumente en los próximos años. El gobierno tiene la intención de invertir en mayor medida en el transporte ferroviario.

Tomando como referencia la Unión Europea, los límites de CO₂ para camiones y autobuses se adoptaron por primera vez en 2019. Los fabricantes de vehículos pesados ​​deben reducir las emisiones de CO₂ de los vehículos nuevos en un 15 % hasta 2025 en comparación con los valores de una flota de referencia en 2019/20. Se espera que para 2030, el límite de emisiones de CO₂ se reducirá al 30%.

Límites de emisión de la aviación

Por primera vez en la historia, la OACI ha desarrollado un límite de registro de CO₂ para aviones. Dado que los límites se relacionan con toda la aeronave y no solo con el motor, se fomentan la aerodinámica y el diseño liviano. Sin embargo, los límites de emisión hasta ahora solo se aplican a los nuevos tipos de aviones comerciales y aún no juegan un papel importante en la logística en curso.

Sin embargo, aquí también se puede identificar una tendencia: los límites para los nuevos tipos de aviones afectarán los límites para los tipos de aviones más antiguos a partir de 2028, siendo así posible una extensión a los aviones de carga.

Límites de emisión para buques

Los nuevos límites para la industria naviera se aplican a partir de 2020, no para las emisiones de CO₂, sino para el nivel de azufre del combustible utilizado, es importante tomar en consideración que el nivel máximo es del 0,5 % y ya no del 3,5 % como antes en 2020.

Qué pueden hacer las empresas de transporte: Calcular las emisiones de CO₂ directas e indirectas siguiendo la norma DIN EN 16258

Para definir objetivos de sostenibilidad razonables, lo primero que debe saber es por dónde empezar. Cálculo de la cantidad y el origen de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de su empresa. Antes faltaba un estándar común para calcular los GEI de los servicios logísticos, esto dio lugar a que las empresas intentaran encontrar sus propios métodos más o menos útiles para calcular sus emisiones de CO₂.

Desde 2013, en Europa, este proceso de cálculo está regulado por la norma DIN EN 16258. Esta es la norma europea para determinar las emisiones de CO₂ y GEI durante el transporte. Considera tres principales dimensiones:

  • Well-to-Tank: captura las emisiones indirectas del consumo de combustible de todas las fuentes de energía (también denominada cadena ascendente).
  • Tank-to-Wheel: captura las emisiones directas de la propia operación del vehículo.
  • Well-to-Wheel: suma de las emisiones directas e indirectas del pozo al tanque y del tanque a la rueda a lo largo de toda la cadena de suministro.

Para fomentar e impulsar el cambio, tomamos como referencia la Asociación Alemana de Transporte de Carga y Logística ha publicado una guía detallada para calcular las emisiones de gases de efecto invernadero en el transporte de carga y logística de acuerdo con DIN EN 16258, que lo guía a través de métodos y ejemplos de cálculo referentes para el mercado mexicano.

La logística verde aporta ideas concretas para procesos logísticos sostenibles

El término Logística Verde (Green Logistics) cubre varios pasos para ayudar a las empresas a reducir sus emisiones de GEI. Sin embargo, Green Logistics no se trata solo de gases de efecto invernadero. También se tienen en cuenta factores medioambientales como los residuos de envases, la contaminación del agua, el aire y el suelo.

Hasta el momento, no existe una definición uniforme del término, la Cámara de Industria y Comercio de Stuttgart describe la Logística Verde en un estudio de la siguiente manera:

“La idea [detrás de Green Logistics], a saber, el registro sistemático y la reducción del consumo de recursos, así como las emisiones de gases y contaminantes atmosféricos en la industria de la logística, es [...] más que una moda pasajera. “Logística verde más bien representa un concepto perdurable para la gestión simultánea de varios desafíos importantes que caracterizan actualmente a la industria de la logística.”

La parte práctica del estudio diferencia entre actividades internas e interempresariales. Muchas acciones se centran en la innovación: desde software para conducción eficiente en combustible hasta tecnología para recuperación de energía y robótica en almacenes.

Fuente: IHK study “Green Logistics”(2021).

¡El tiempo de actuar es ahora!

El aumento de los precios de las materias primas y la energía sería motivo suficiente para que los procesos logísticos contaminen menos CO₂. Además, los clientes y empleados prestan cada vez más atención a la sostenibilidad, los políticos al menos están mostrando un gran compromiso con la reducción de emisiones en el sector logístico.

Pero los objetivos de sostenibilidad por sí solos no son suficientes. Incluso si aún no desea cambiar su flota a vehículos eléctricos, hay muchas maneras de actuar de una manera más eficiente en el uso de los recursos. Ya sea la expansión de edificios de almacenamiento energéticamente eficientes, la tecnología de recuperación de energía o el uso de robótica eficiente, el potencial para que las empresas de logística inicien procesos preparados para el futuro y se conviertan en pioneros en logística sostenible es enorme.